Jose Garzón.
Igual que soñé con jugar en el Madrid y apenas pude hacerlo en el juvenil de mi pueblo, quise componer canciones y tan sólo consigo hacer brillar, pocas veces y a duras penas, algún verso. Las maneras del silencio son las maneras de anudar música y poesía y sus perfiles se trazan con la mezcla de rabia y determinación que me lleva a escribir cuando escucho ciertas canciones. Porque se escribe con rabia. Lo demás es narcisismo de leerse.
Ella dijo que todas tus palabras están equivocadas (Come break my heart again, The Lone Bellow)
Ven a romperme
el corazón otra vez
y hazlo con una sonrisa
o mientras me abrazas.
Dime que te vas,
que no puedes soportar
esto que se parece
a mi vida. Que nunca
has estado, que nunca
volviste en realidad.
Ríete de mí,
llora en silencio
frente a los espejos,
comenta por ahí,
en voz baja a mis espaldas,
que no soy lo que parezco
y los andamios
se tambalean
apenas sopla el viento.
Que el tamaño sí importa
y en el amor soy
egoísta. Que estoy lleno
de defectos y de miedo,
y, en verdad,
nunca me quisiste.
Que te gustan más altos
o con más dinero. Que ya
no te hace daño
ni te lo hará jamás
que me muestre indiferente.
Que no eres única para mí
y, con tenerte
un minuto, me basta.